¿Para qué se utilizan los cilindros hidráulicos?
Este es uno de los tipos de motores más simples de diseñar, fabricar y usar. El funcionamiento de estos dispositivos es recibir y transferir energía mecánica, que se genera bajo la influencia de la presión sobre el líquido dentro del volumen de trabajo del dispositivo. La energía se transfiere a través del vástago retráctil.
El primer cilindro hidráulico telescópico conocido fue patentado por el inventor Joseph Brama en el siglo pasado. Desde entonces, solo los materiales con los que están hechos los dispositivos han cambiado significativamente, así como también han mejorado los fluidos de trabajo. Los principios por los que funcionan los cilindros hidráulicos siguen siendo los mismos. Uno de los ejemplos más famosos de un dispositivo de este tipo es el gato de automóvil moderno.
La base del funcionamiento de dicho motor es el movimiento del pistón a lo largo de una determinada trayectoria, la presión sobre el fluido de trabajo y la transferencia de la energía recibida a la palanca del mecanismo. El líquido utilizado para ello se caracteriza por un mínimo grado de compresión, lo que permite aumentar la potencia de la energía mecánica transmitida.
Los cilindros hidráulicos se dividen en dos tipos: de simple efecto y de doble efecto. En un pistón de un solo lado en el proceso de movimiento de traslación se acumula presión en una dirección, en dos lados, en ambas direcciones. El retorno del pistón en el primer caso se realiza a la fuerza, en el segundo, de forma independiente.
Según el tipo de acción, los dispositivos se dividen en rotativos, telescópicos y de pistón. Se utilizan para la producción de equipos de construcción y elevación, vehículos de transporte, prensas hidráulicas, equipos especiales, máquinas herramienta (forja, corte de metales, prensado). Debido a la simplicidad del diseño y la extraordinaria confiabilidad, este tipo de motor se usa incluso en aviación y astronáutica.